¿Qué es la flora intestinal?
Se conoce como flora intestinal al conjunto de microorganismos que viven en el intestino, principalmente bacterias. Estas no son dañinas para la salud del huésped, sino que son beneficiosas, por lo que es importante tener una flora intestinal equilibrada para el buen estado de salud general del organismo. La flora intestinal es un órgano más, con funciones propias y que se relaciona con el resto de nuestro organismo.
Hasta hace poco tiempo se creía que la única función del intestino era la de la digestión y absorción de los alimentos, pero en los últimos años, se ha demostrado que resulta un órgano fundamental para la correcta maduración del sistema inmunitario, entre otras importantes funciones, y que para ello la flora intestinal juega un papel fundamental.
- Existen más de 400 especies de microorganismos diferentes en nuestro intestino. Se concentran fundamentalmente en el intestino grueso o colon.
- La composición de la flora intestinal es única y tiene un patrón distintivo en cada individuo, generado desde el momento de nacer por transmisión de la madre al bebé y posteriormente por el ambiente en que vivimos y nuestros hábitos alimentarios e higiénicos.
- Más de 100 billones de bacterias conforman nuestra flora, entre las que destacan los lactobacilos y las bifidobacterias. El número de bacterias que viven en nuestro intestino es 10 veces mayor que el total de células que tenemos en nuestro cuerpo. El 95% de estas bacterias viven en el colon.
Funciones de la flora intestinal
La microbiota o flora intestinal es un ecosistema extremadamente rico, diverso y muy complejo, formado por millones de microorganismos entre los que se encuentran bacterias, levaduras o virus. Se trata de una amplia comunidad que proporciona múltiples beneficios para nuestra salud, como ayudarnos a evitar las infecciones gastrointestinales o a fabricar vitaminas esenciales, por lo que es imprescindible que mantengamos su equilibrio y buen estado para asegurar una buena salud.
Los microorganismos que habitan en nuestra flora intestinal son muy beneficiosos para nuestro organismo ya que ayudan a realizar funciones esenciales para nuestra salud:
- Actúan como defensa del organismo reforzando nuestras defensas frente a virus externos, nos protegen frente a diarreas causadas por antibióticos y ante otros tipos de enfermedades.
- Ayudan a que nuestro sistema digestivo funcione correctamente, aliviando los síntomas del estreñimiento o diarrea y mejorando el ritmo intestinal.
- Contribuyen a la producción de vitaminas B y K, aminoácidos, y nos dan la energía necesaria para el funcionamiento de nuestro organismo.
- Colaboran para realizar una correcta absorción de minerales como el calcio, el hierro y el magnesio.
- Producen ácidos grasos de cadena corta necesarios para el buen funcionamiento de las células intestinales.
La importancia de mantener el equilibrio de la flora intestinal o microbiota intestinal
Mantener el equilibrio de la flora intestinal es esencial para evitar que surjan desórdenes que afecten al funcionamiento de todo nuestro organismo, la flora intestinal es la que contribuye a que tengamos una buena digestión y cuando se encuentra alterada y pierde su equilibrio, perdemos la capacidad de absorción de nutrientes y podemos sufrir molestias digestivas como hinchazón, estreñimiento o diarrea.
Además, la flora intestinal también ayuda a mantener el buen estado del sistema inmunológico, la producción de factores de crecimiento y vitaminas, la inactivación de toxinas, la reducción de lípidos sanguíneos...
Por ello, mantener una flora intestinal equilibrada es clave para evitar molestias digestivas.
¿Qué factores pueden alterar el equilibrio de la flora intestinal?
La flora intestinal es un ecosistema complejo y muy frágil expuesto a diversos factores o situaciones que pueden romper su equilibrio, disminuyendo su capacidad de autorregulación. Existen dos tipos de factores que influyen y pueden alterar el funcionamiento de la microbiota:
Factores Intrínsecos:
Entre los factores intrínsecos que pueden alterar el funcionamiento de la microbiota destacan:
- La composición de nuestra flora intestinal.
- Si tenemos una predisposición hereditaria.
- El tipo de nuestras secreciones intestinales.
- Trastornos gastrointestinales que tengamos de por sí como pólipos, celiaquía, la enfermedad de Crohn, etc. Pueden ser trastornos agudos como la diarrea del viajero o crónicos, como el síndrome del intestino irritable.
- El envejecimiento de cada persona, que hace que a partir de los 60 años se produzca un descenso de las bacterias beneficiosas.
- Alergias o intolerancias que pueden llegar a causar dolor abdominal, diarreas o estreñimiento.
Factores extrínsecos :
Los factores extrínsecos son aquellos que derivan directamente de nuestras acciones y que podemos controlar y corregir fácilmente.
- Incorrecta alimentación o cambio brusco en ella: cuando se viaja a otro país en el que su alimentación es muy diferente de la nuestra o cuando abusamos de la comida rápida, bollería, alcohol, etc.
- Tener unos hábitos poco saludables como el sedentarismo, el insomnio o ingerir poca fibra en nuestra dieta diaria.
- Terapia antibiótica: los antibióticos reducen de forma drástica la funcionalidad de la flora intestinal, pudiendo causar diarrea en muchos casos.
- Infecciones recurrentes como la faringitis o la otitis, que inducen al consumo periódico de antibióticos.
- Uso continuado de laxantes.
- Estrés.
- A menudo, al viajar a otros países podemos entrar en contacto con bacterias que se encuentran en los alimentos o el agua, a las que nuestro cuerpo no está acostumbrado y nos pueden producir un desequilibrio en el ecosistema intestinal que se manifieste en forma de diarrea del viajero.
- Los antibióticos son uno de los mayores enemigos de nuestra flora intestinal, la destruyen parcialmente y pueden producir un estado de alteración que puede conllevar consecuencias negativas para la salud a corto y largo plazo. Los niños son especialmente sensibles a este efecto.
Consecuencias de alterar la flora intestinal
El equilibrio de la microbiota intestinal es clave para prevenir enfermedades, por eso la alteración de nuestra flora intestinal puede producir trastornos gastrointestinales como:
- Hinchazón abdominal: la sensación de tener el vientre hinchado puede deberse a una alteración de la microbiota, que hace que no sea capaz de expulsar el gas que debería.
- Estreñimiento: cuando la microbiota está desequilibrada, suelen aparecer unas bacterias que perjudican a la motilidad intestinal dándonos problemas para ir al baño.
- Diarrea frecuente: el desequilibrio en la composición de la microbiota puede causar diarrea.
- Eructos y gases: aparecen por una gestión deficiente de los gases que se generan durante el proceso de la digestión.
- Dolor abdominal y cólicos: es uno de los principales trastornos que desencadena el desequilibrio de la flora intestinal.
Consejos para restablecer el equilibrio de la flora intestinal
Para recuperar nuestra flora intestinal, es muy importante que sigamos una alimentación variada rica en frutas, verduras, legumbres y semillas. Debemos incluir en nuestra dieta alimentos como los tubérculos y las legumbres, ya que son alimentos con alto contenido en fibra y que serán unos aliados perfectos para recuperar el equilibrio de nuestra microbiota intestinal.
También debemos evitar el consumo de sustancias como el tabaco y el alcohol y llevar un estilo de vida relajado en el que combinemos una dieta saludable y algún deporte. Si tienes alguna alergia o intolerancia detectada, no consumas bajo ningún concepto esos alimentos que sabes que pueden causar daños a tu sistema digestivo.
Para restablecer el equilibrio de tu flora intestinal también puedes ayudarte de un probiótico.