Consejos para equilibrar tu flora intestinal
La flora intestinal está compuesta por millones de microorganismos que la configuran como un ecosistema rico y diverso capaz de proporcionar numerosos beneficios para la salud si se encuentra en equilibrio, puesto que algunas pueden resultar perjudiciales. Algunos signos de que tu flora o microbiota intestinal puede estar alterada son la aparición de trastornos digestivos como hinchazón, estreñimiento o diarrea, halitosis o flatulencias. Para mantenerla en equilibrio y evitar estos problemas, desde Ultra Levura te recomendamos las siguientes claves:
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Huye de las grasas saturadas: una dieta rica en grasas saturadas puede generar cambios en la estructura de la microbiota y estimular la secreción de bilis, un ambiente muy propicio para el crecimiento de bacterias más perjudiciales.
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Deja de fumar: la nicotina contribuye a que tu flora intestinal sea de peor calidad e influye en el buen funcionamiento del aparato digestivo.
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Ve al baño con regularidad: debes procurar reservar todos los días el mismo período de tiempo para ir al baño, procurando que sea después de las comidas. De esta manera acostumbrarás a tu aparato digestivo y la harás adquirir el hábito.
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Añade fibra a tu dieta: intenta incorporar a tu dieta alimentos con gran cantidad de fibra como los frutos secos, las verduras y frutas, cereales integrales y las legumbres. Conviene tratarlas poco para comerlas: las frutas en crudo y con piel, la verdura en ensalada o cocida, los frutos secos con yogur o ensalada y las legumbres mejor hervidas que guisadas.
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Haz ejercicio de forma regular: es importante que mantengas una vida activa, pues contribuye al buen funcionamiento del aparato digestivo. Puede bastar con caminar un mínimo de media hora diaria y cambiar ciertos hábitos como subir escaleras en lugar de usar el ascensor, ir a la compra andando en lugar de usar el coche, etc.
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Toma leche fermentada: las leches fermentadas o los yogures frescos contienen algunas de las bacterias buenas importantes para tu flora intestinal. También puedes introducir estos microorganismos a través de suplementos que contribuirán a equilibrar tu microbiota.
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Bebe mucho líquido: se recomienda beber al menos dos litros de agua al día.
